Terremoto en Ancash
Con sus manos entrecruzadas,la
mirada hacia un punto imaginario,Anibal Osorio recuerda como a sus 12 años un
terremoto, en complicidad con las montañas del Huascarán, provocó un huaico que
sepultó la ciudad de Yungay y provocó la muerte de aproximadamente 80 mil
persona.
Era la tarde del 31 de mayo de
1970 cuando en la provincia de Ancash ocurrió el terremoto de 7,9 grado escala
de richter, este trajo consigo el desprendimiento del hielo y rocas del nevado
Huascarán huaico que cubrió el pueblo de Yungay.
«Los brazos sobresalían del
suelo, al parecer las personas atrapadas estaban con vida pero por el peso del
barro no lograron salir y murieron»,
comentó Osorio, de manera pausada.
En el desastre sobrevivieron 200 personas, en
su mayoría jóvenes entre 12 y 20 años.
Este no fue el sucedo que marcó
a la provincia de Ancash. Ese trágico día el terremoto destruyo pistas, casas e iglesias de varios pueblos
como Samanco y Huaylas , también el corte de energía eléctrica, ya que la
hidroeléctrica del Cañón del Pato quedó inhabilitada.
El presidente, Juan Velasco Alvarado, envió ayuda en barcos hasta la provincia de Ancash. También varios países como Rusia colaboraron con alimentos y servicios a la provincia.